Crónica concierto de Nashville Pussy en Barcelona, actitud y honestidad por encima de todo


Nashville Pussy siempre resulta un valor seguro a la hora de escoger un concierto. Muy mal deberían ponerse las cosas para que el matrimonio formado por Blaine Cartwritgh (guitarra y voz) y Ruyter Suys (guitarra) decepcionase a los asistentes a una de sus presentaciones en directo. En su última visita a Barcelona, respaldados por Bonnie Buitrago (bajo) y Ben Thomas (batería) volvieron a exhibir sus cualidades en una actuación frenética donde alcohol, sudor y actitud se mezclaron de tal manera que el ambiente en la sala pequeña de Razzmatazz acabó por embriagar de entusiasmo al público presente.



El grupo originario de Atlanta presentaba su último álbum Pleased To Eat You, publicado el pasado 2018 y, consecuentemente, fue uno de los más representados junto con High As Hell (2000), así como Up The Dosage (2014). Algunas versiones interpretadas con su personal estilo y piezas básicas como la inicial “Pussy Time”, la pegadiza “Why Why Why” y la imprescindible “Go Motherfucker Go”, que cerró la actuación, completaron un recital vibrante de principio a fin, sin apenas respiro, ni siquiera para los bises ya que Blaine dijo algo así como que no iban a perder el tiempo en bajarse del escenario para subir a los pocos minutos. Y es que Nashville Pussy no están para paripés, ni ¡hostias! Son puro sentimiento y presencia. En todo caso, solo bajaron algo las revoluciones durante la ejecución del tema de Steve Earle, “CCKMP”.

Tras acceder al escenario mientras sonaba el tema de la banda sonora de la película Shaft, que Isaac Hayes popularizara a principios de la década de los setenta, arrancaron con un sonido algo estruendoso que, poco a poco, fue alcanzando el nivel adecuado. Después de interpretar los cuatro o cinco primeros temas de forma apasionada, sobresaliendo el insistente riff de “Wrong Side Of Agun”, Nashvile Pussy ya se habían ganado al público. Y era solo el principio.



La continuación fue la confirmación de estar ante una banda que lo da todo en cada canción. Parecía que Ruyter Suys estuviese algo más comedida de lo habitual, fue solo en apariencia, quizá para darle parte del protagonismo a Blaine porque, cuando la guitarrista cogió la directa no hubo quien la parase. Convertida en una especie de cruce entre Ted Nugent y Angus Young, a medida que avanzaba el concierto se convirtió en el torbellino que conocemos y, ofreciendo todo un espectáculo, terminó por acaparar la atención de los presentes, tanto por sus evoluciones solistas como por sus locuras escénicas cuyo punto culminante fue la rotura de las cuerdas de su guitarra. Acabó exhausta tendida en el suelo.

No faltaron otros acostumbrados rituales protagonizados por Blaine como, empujar el micro con fuerza para recogerlo con el cable antes de que se estrellase en el público, brindar con Jack Daniels, y beber cerveza a borbotones directamente desde su sombrero para quedar totalmente empapado mientras presentaba a la banda durante el tema “Low Down Dirty Pig”, en el que también Ben Thomas tuvo la ocasión de mostrar sus cualidades con un breve solo de batería. Por otra parte, a Bonnie Buitrago se la notó muy activa, mucho más compenetrada de lo que estaba en sus primeras visitas españolas con la banda, adelantándose al borde del escenario en varias ocasiones como también lo hicieron Blaine y Ruyter para deleite de los aficionados.



Puede que acudir a un festival de los muchos que se organizan en la actualidad resulte una experiencia única e inevitable para todo aficionado pero, vivir una actuación de Nashville Pussy en una sala en la que prácticamente notas como la adrenalina corre por las venas de los músicos y, literalmente, su sudor te salpica en los ojos, además de tener que esquivar la guitarra de Ruyter para que no te impacte en la cabeza, no tiene precio.

A los escasos minutos de haber concluido la actuación, Ruyter ya estaba en la zona de salida de la sala compartiendo experiencias, conversando y haciéndose fotos con quien se lo requería. Lo dicho, actitud y excelente trato para con sus seguidores.

ONE PORK BAND

Ante una sala aún con escaso público, apareció el peculiar invitado llamado One Pork Band que, como su nombre indica, es un proyecto formado por un solo tipo. Un personaje curioso que se presenta trajeado, con pasamontañas, y no dice ni una sola palabra, ni para presentarse ni para despedirse, solo conocemos su voz cuando canta, y a medias, puesto que utiliza un distorsionador. Provisto de guitarra, bombo y samplers, el misterioso músico fue desarrollando su peculiar música, una especie de rock and roll convenientemente vigorizado con robustas distorsiones y recurrentes percusiones.


EL SET LIST

01 PUSSY TIME (Get Some!)
02 PIECE OF ASS (High As Hell)
03 WRONG SIDE OF A GUN (High As Hell)
04 PILLBILLY BLUES (Up The Dosage)
05 RUB IT TO DEATH (Up The Dosage)
06 GO HOME AND DIE (Pleased To Eat You)
07 WE WANT A WAR (Pleased To Eat You)
08 SHE KEEPS ME COMING AND I KEEP GOING BACK (Pleased To Eat You)
09 CCKMP (Versión de Steve Earle)
10 LOW DOWN DIRTY PIG (Pleased To Eat You)
11 FIRST I LOOK AT THE PURSE (Versión de The Contours)
12 GO TO HELL (High As Hell)
13 (I WANNA) TESTIFY (Versión de Parliament)
14 WHY WHY WHY (From Hell To Texas)
15 STRUTTIN COCK (High As Hell)
16 TILL THE MEAT FALLS OFF THE BONE (Up The Dosage)
17 GO MOTERFUCKER GO (Let Them Eat Pussy)

LOS DATOS

FECHA: 01-07-2019
CIUDAD: Barcelona
LUGAR: Sala Razzmatazz 3
GRUPO: Nashville Pussy
DURACION: 75 minutos
INVITADOS: One Pork Band (25 m.)
PROMOTOR: Milestone/Noise On Tour
TOUR: Pleased To Eat You Europe 2019

TEXTO Y FOTOS LOCKY PEREZ



Comentarios

Entradas populares de este blog

Mejores álbumes grupos españoles 2023

Cuadernos del Rock (1): 20-marzo-1983: Rod Stewart – Los Nuevos Románticos.

Cuadernos del Rock (4): 10-abril-1983. Bryan Ferry, Alban Rock: Abraxas, Wilky Way, Easy